Tips para vivir la Navidad en familia

Estamos en una de las épocas más importantes del año del significado de la Cristiandad: el nacimiento de nuestro señor Jesucristo.

Sin embargo, en los últimos tiempos, las fiestas navideñas han tomado un significado más comercial, y menos religioso, la gente en la actualidad ve la Navidad como algo material, compra desenfrenadamente, el tráfico se vuelve un caos, hay estrés, prisas, posadas que no tienen qué ver con la verdadera esencia de la Navidad, que es “EL NACIMIENTO DE CRISTO”.

Debemos descubrir de nuevo, el verdadero significado de las celebraciones, haciendo que Jesús nazca en cada corazón de los miembros de la familia.  El hermoso signo del pesebre, causa siempre asombro y admiración en los niños.

Formar un pesebre es un acto de amor a Dios, expresión de optimismo, esperanza, fe, alegría de que Jesús nace en todos los tiempos y lugares. Ante el Belén, la mente nos transporta espontáneamente a cuando éramos niños y esperábamos con entusiasmo el tiempo para construirlo. Estos recuerdos nos llevan a tomar nuevamente conciencia del gran don que se nos ha dado, a sentir el deber y la alegría de transmitir a nuestros hijos la misma experiencia.

Se aprende desde niños, cuando papá, mamá, junto a los abuelos, tíos, primos, transmiten la fe con esta dulce y alegre tradición. Luego, en cada etapa de la vida, nos educa a contemplar a Jesús, a sentir el amor de Dios por nosotros, sentir y creer que en esto está la verdadera felicidad. Abramos el corazón a esta gracia.

Compartimos unas sugerencias prácticas, para vivir la Navidad en familia:

1.- Primer anuncio de la Navidad: la Corona de Adviento. Se puede hacer con cartoncillo, que los niños peguen papel crepé verde como follaje, y que coloreen cada domingo una vela. Explicar el significado, cómo preparamos nuestro corazón, para que Jesús nazca en él.

2.- Hacer el Belén entre toda la familia. Dejarlos que usen su creatividad e imaginación, con palitos, con cartón, dibujos, arena, riachuelos, la mula, el buey, pueden ir cubriendo el pesebre con paja o tiras de papel estraza que simulen la paja, y cada vez que hagan una obra buena colocan una paja.

3.- Establecer una meta semanal. Tener un encargo para el bien común de la familia, una obra de caridad, alguna acción buena del día, hacer una tarjetita e irlas colocando en una cajita, que será el regalo que se entregará al niño Jesús en Nochebuena.

4.- Aprovechar los momentos de traslados y de viajes en el carro para poner canciones y villancicos que anuncien la alegría de la Navidad.

5.- Tener una Biblia infantil. Si acostumbramos a leerles un cuento por las noches, en esta época les podemos leer un evangelio a su nivel: “La anunciación”, “La visitación”, “Camino a Belén”, “El nacimiento del niño Jesús”, “La adoración de los Reyes Magos”, y mucho más.

6.- Pedir posada y adorar al niñito Jesús. Aprovechar la cena de Nochebuena, donde está reunida toda la familia, para pedir posada y cargar al niño Jesús, decirle algo bonito, darle las gracias, besarlo, hacerle una pequeña oración y colocarlo en el pesebre con mucho cariño.

¡Deseamos que tengas una muy feliz Navidad!

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Esta entrada fue escrita porPatricia Monroy